BLOG DE RAFA PARRA SOLER

De vocación, poeta, ensayista y dramaturgo.











sábado, 12 de junio de 2010

Fútbol, caca

¿Cómo es posible que la actividad más banal e improductiva del planeta genere millones de euros, dólares, libras, etc.? ¿Cómo es posible que Cristiano Ronaldo gane más que cualquier médico? ¿Y cómo es posible que haya tantos licenciados universitarios en el paro?

En lo futbolístico, la culpa la tiene el pueblo, que obedece a los dictados de la sociedad de consumo. El mercado manda porque el pueblo le hace caso, porque la gente no se para a pensar qué es lo que quiere de verdad, sino que se va a lo fácil, a lo primero que le ofrecen, sea bueno o malo.

El mercado es un agente muy poderoso. Tiene a su servicio todo tipo de especialistas en manipulación mental: psicólogos, sociólogos y publicistas que saben perfectamente cómo tocar la fibra sensible del espectador, del consumidor, es decir, aquello en lo que el mercado ha convertido a las personas. Con todo tipo de recursos psicológicos, estéticos y publicitarios en general, los dueños del mercado se las ingenian para conseguir que las personas se conviertan en consumidores de sus productos, entre los cuales está el negocio del fútbol. En este campo, como en todos los demás, los dueños del mercado apelan a lo más irracional y vulnerable del individuo, a su necesidad de creer en algo o alguien superior a quien intentar parecerse, y es en esta fase del proceso manipulador donde entran en juego los iconos ideológicos, estéticos y publicitarios. Esto es lo que hace que Cristiano Ronaldo y Leo Messi sean elevados a la categoría de dioses por parte de los consumidores (en este caso, los hinchas deportivos). Una vez se llega a consolidar ese sentimiento de idolatría y veneración popular, el mercado se dispone a lanzar su producto (un coche, una espuma de afeitar, un banco donde ingresar la nómina,etc.). Sin olvidar el mercadeo de los productos oficiales del club de fútbol al que pertenece el jugador en cuestión: camisetas, bufandas, pulseras, relojes, mecheros, botas, mochilas, toallas... El fetichismo del consumidor es explotado hasta la saciedad del empresario, que no conoce límites a la hora de obtener beneficios por hacer temporalmente felices a los pobres infelices que consiguen sentirse un poco menos mediocres por poseer un objeto de su futbolista preferido.

Los defensores del capitalismo se defienden diciendo que el socialismo lo que hace es criar borregos amamantados por el Estado, cuando ellos, como mínimo, hacen lo mismo, pero en lugar del Estado, es el Consumo el que amamanta a los borregos. La diferencia está en que, por lo menos, el Estado reparte la riqueza y ninguno de los borregos se queda sin amamantar. Por el contrario, Papá Consumo sólo protege a los borregos que se lo pueden permitir.

14 comentarios:

  1. Estoy parcialmente contigo de acuerdo; pero en ese "fetichismo" deberías incluir no sólo al fútbol, sino a todos los espectáculos considerados "de masas" a lo largo de la historia, porque los ha habido tanto como el fútbol.

    Echo de menos, por ejemplo, una reflexión acerca del teatro en España durante el siglo XVII; porque con toda su enorme excelencia (y salvando las diferencias entre una época y otra),jugaba el mismo papel mercantilista en nuestro país que el fútbol hoy en día: "opio" del pueblo -entre las clases más o menos pudientes- ¿para que la gente se olvidase, por ejemplo, de la crisis causada por la decadencia más que consumada del imperio español de los Austrias? O también otra mención sobre el cine antes de que el fútbol (o los deportes en general) lo sustituyeran como gran espectáculo de masas desde la primera mitad del siglo XX.

    Con esto no pretendo, como bien creo que debes intuir, meterme con estas dos grandes artes de las cuales también soy aficionado; sólo hacerte ver que, en su momento, también fueron espectaculos "fetichistas" y de masas, utilizados para entretener a la gente mientras se ocultaban otros asuntos más importantes. Además de defender la falta de culpabilidad que el fútbol, entendido únicamente como deporte, tiene en todo esto. Será que yo no soy "mercantilista" en estos temas, y sólo me interesa lo que pase sobre el terreno de juego...

    P.D. Recalco, lo cortés no quita lo valiente: con tu primer párrafo, totalmente de acuerdo.

    ResponderEliminar
  2. Completamente de acuerdo contigo, Rafa.

    Comparar el fútbol con el teatro del siglo de oro me parece cuanto menos escandaloso. ¿Hace falta que me ponga a hacer un repaso de las diferncias más someras? La más descarada me parece el hecho de que una sea un arte y la otra un entretenimiento banal. De todos modos, no creo que el impacto de uno pueda compararse ni de lejos al impacto del otro. Estoy seguro de que la cantidad de público que reciben todos los partidos de un fin de semana supera con creces a la cantidad de público que recibían todos los corrales de comedia en un año. Puede que ambos sean diversiones, pero negocio sólo uno. Esta comparación no sólo es anacrónica, sino que además me parece demagógica. Defender el fútbol amparándose en el teatro no tiene ningún sentido.

    Pan y circo, convertido en pan y fútbol. Lo del mundial cada día me da más vergüenza ajena. Ojalá y eliminen a España lo antes posible para que nos quitemos de ese sacadinero y duermeconciencias. Es la manipulación más grande que ha habido y que seguramente habrá en la historia del mundo. Y todos pasamos por el aro. Menos mal que quedamos unos pocos con dos dedos de frente que nos damos cuenta de este inmenso engaño. Sin embargo, estamos en la sociedad del pelotazo, del éxito fácil, del pensamiento atrofiado. Una sociedad perfecta para que triunfe el fútbol, vamos.

    ResponderEliminar
  3. Sí, vale, yo también estoy de acuerdo en que un futbolista no debe ganar más que un médico (si el médico es bueno y hace bien su trabajo, que también los hay...) pero tampoco quiero que España se vaya la primera porque entonces me va a caer la gorda con Massimo todo el día recochineándomelo...
    Pero sí, el fútbol es una de las tantas mierdas que apestan esta sociedad. Como deporte, como afición, actividad de tiempo libre me parece bien, pero los extremos a los que se lleva son tremendos.
    Por eso, viva er Betis manque pierda ;)
    Besos!

    ResponderEliminar
  4. Firmo sin leer el blog, ¿vale? igual que has hecho tú con la peli...pues...me parece...que opino...que...sí, sí, todo es una mierda, y los futbolistas son unos guarros que escupen en la hierba...oh, qué gran opinión la mía.

    ResponderEliminar
  5. Enga, vale, ahora lo he leído y desde ya os digo que va a ver el mundial su puta madre, que ojalá España coja la salmonelosis en el avión y ni siquiera llegue a África, porque así sería un poquito menos coñazo encender la tele o ir a un bar en estos días.
    Lo más interesante del mundial es el multazo que va a tener que pagar Shakira por plagiar la canción -Waka, waka- a una señora negra de los años 70. Borregos, llenad vuestras despensas de cerveza y patatas fritas, sacad la bufandita de rigor en pleno Junio y no salgáis a la calle. Por más que os duela el culo, no lo levantéis del sofá, que pierde su formita.

    Lo de comparar el fútbol con el teatro ha sido ya lo más. Porque si la gente iba al teatro en el barroco español, además de porque es el mejor teatro jamás escrito -Lope, te quiero- es porque no tenían otra cosa mejor que hacer. O en casa o en el teatro. Pero pasarse los fines de semana con el culo grapao al asiento y los ojos orbitando hacia la tele, viviendo en la era del cine 3D, los conciertos al aire libre, los recitales poéticos, los festivales de teatro, los bares de tapas, las ferias locales, los chiringuitos de la playa, los mercaditos mediaevales y el sexo seguro y no como medio de reproducción me parece PATÉTICO.

    ResponderEliminar
  6. En fin... lamentablemente veo que se ha optado por lo fácil -antifutboleros criticando el fútbol- y que apenas si se ha comprendido el espíritu de mi respuesta (curiosamente el autor de este tema ha sido casi el único que sí lo ha entendido). Fútbol = "opio del pueblo" en el siglo XXI = negocio actualmente; teatro = "opio del pueblo" en el XVII = negocio de la época; cine = "opio del pueblo" en la primera mitad del siglo XX (sobre todo en USA) = negocio en aquel momento. Benditos sean todos ellos; pero es que la cosa era así.

    Rafita, sobre tu contestación en mi blog, guste o no yo me pienso dedicar a esto (que lo consiga o no es otra cosa, pero lo voy a intentar); pero que no te quepa duda que yo no voy a ser como los "Manolos", porque ese tampoco es mi estilo. Así que tranquilo, que no tendrás que odiarme ;)

    Lau, el fútbol (como cualquier otro deporte) no sólo se ve en la tele; hay quien también va al campo a disfrutar del espectáculo y del ambiente (cuando no hay cafres que lo estropean), por ejemplo un servidor durante 15 años. Exactamente como el cine en 3D, los conciertos o los recitales poéticos. Que es más caro ya lo sé (por eso ahora no voy); pero que también se puede disfrutar así está más que claro.

    ¿Qué quiero deciros con esto? Que estoy completamente de acuerdo con lo del dinero que ganan los futbolistas (es lo primero que he dicho), pero que las cosas que no le gustan a uno también hay que respetarlas, y que no hay que condenar un tipo de espectáculo sólo porque no guste.

    Para terminar, sólo digo una cosa: además de ser aficionado al fútbol (y al teatro, y al cine, no lo olvidemos, pero como aquí sólo se le pega al fútbol yo, aunque sea para defenderlo como deporte que me gusta tengo que salir a contestar), el Mundial me va a dejar algo más de 200 euros en mi cuenta (gracias, Rafa, una vez más por haberles dado mi dirección a éstos). Que es poco, ya lo sé; pero algo es algo; cosa que igual no ocurriría si no hubiese habido Mundial o si no hubiese estado España. Nada más por eso deberíais alegraros un poquito de parte del "bombo" que se le está dando al Mundial y al fútbol en general.

    ResponderEliminar
  7. Y que conste que lo cortés no quita lo valiente: como bien ha dicho Rafa en la contestación dejada en mi blog, el teatro, el cine, la música (cuando es de calidad), la poesía... todas esas actividades son más elevadas culturalmente que el fútbol o los deportes en general; pero joder, Ale, Lau, un poco de respeto, por favor... que el que guste el fútbol no es nada indigno para el ser humano.

    ResponderEliminar
  8. Ya lo decía don pio baroja, estabamos perdiendo las colonias y la gente estaba mas interesada en la temporada taurINA;aunque tampoco se te puede olvida que el futbol tambien genera riqueza y da empleo a mucha gente,piensa en los derechos de television,ese convenio da mucho trabajo en las cadenas,o la gente que trabaja en los estadios,o las tiendas de ropa deportiva,nunca has pensado que muchos talleres viven de eso.Por último decirte que el museo mas visitado de madrid por los extranjeros es el del bernabeu,si supieras lo que se recauda por dia.Bueno por ahi dicenque cuando la demanda se equilibra a la oferta hay menos inflacion ,creó ¡eh!,no sé de toria economica,o sea se,me parece bie n que el futbol genere riqueza.Otra cuestion es la parafernalia de la fifa.los pequeños equipos ,.....etc.Sobre el sueldo de los jugadores y su idolatrizacion,estoy comple tamente de acuerdo,rafa,un tope salarial ya,de todas maneras la gente siempre idolatrizara a alguien,hace siglos serian los cantantes ,actores,artistas,hoy en dia conviven con los futbolistas ,por eso es tan importante su conducta porque son modelos para la gente joven,bueno te dejo que me he enrollado,ponme los acentos.

    ResponderEliminar
  9. Los neolibreales siempre andáis con la misma justificación: las empresas generan riqueza y puestos de trabajo. Sí,sí: riqueza, para los empresarios; puestos de trabajo... basura, evidentemente. Trabajos temporales con sueldos de risa. Te pongo el ejemplo de Isla Mágica,donde mi cuñado estuvo trabajando dos semanas, concretamente, en uno de los restaurantes de este parque temático. ¿Sabes a cuánto le pagaban la hora? A cinco miserables euros. Lo dejó, porque gana más arbitrando partidos de joquey los fines de semana.

    ResponderEliminar
  10. Víctor ( Dos Hermanas)15 de junio de 2010, 3:40

    Como es de buen gusto intelectual ensañarse con el fútbol ( no sea que el balón vaya a destrozar los delicados jarrones de la cultura), no esperaba menos de vosotros, amigos (con todo el cariño, Alex y Rafa).

    Ale, dices que el fútbol no es arte.Deberías escuchar más a tu admirado Luis Alberto de Cuenca, que lo defiende como tal cada vez que tiene ocasión ("el fútbol es arte, magia, geometría"). Un talento iletrado también puede crear belleza, y el fútbol, en su más alta expresión (la plasticidad de la danza de Zidane con el balón, x ej), también puede llegar a lo sublime por otros cauces. Es cierto que los salarios son aberrantes ( aunque no sean más que cruel justicia capitalista-tanto produces, tanto ganas-), pero no es menos cierto que tenemos innumerables ejemplos de esas aberraciones en el arte. A mí, por ejemplo, gran parte de la obra de Picasso me parece una bazofia carente de arte y artificio,y sin embargo se pagan cantidades desorbitadas por esos cuadros.
    Por otra parte, en el fútbol, igual que en el teatro, se recrea un mundo al margen del real donde se ponen de manifiesto todas las fuerzas íntegras de la sociedad ( esto lo dice Ezequiel Martínez Estrada): religión, nacionalidad, sangre, enconos, política, anhelos de éxito, odios, "todo en los límites del delirio en fundida masa ardiente". En ese sentido, en el refelejo de las pulsiones del hombre, sí es comparable al teatro. Ya lo decía A.Camus: "lo mejor que sé sobre la moral de los hombres se lo debo al fútbol".

    PD: Alex, aquí va una lista de intelectuales ("sin dos dedos de frente") amantes del fútbol: Vargas Llosa, Vázquez Montalbán, Cela, Luis Alberto de Cuenca, Mario Benedetti, Osvaldo Soriano, Juan Cruz, Alejandro Martín (jeje). Y TODOS ESTOS SÓLO A VUELA PLUMA...

    1 abrazo

    ResponderEliminar
  11. Pues para vosotros el fútbol, los futbolistas, las camisetas sudadas, Shakira, los baloncitos de colores, los insoportables anuncios de Tele 5 sobre el mundial, Sudáfrica y toa la pesca. Yo doy gracias todos los días por tener un novio NO FUTBOLERO y una familia deportista pero no forofa. Menudo coñazo!!!

    ResponderEliminar
  12. Me alegra y halaga que esta entrada de blog esté dando tanto de qué hablar. Muchísimas gracias a todos por vuestros comentarios, pues de todo se aprende para llegar a la sabiduría.

    ResponderEliminar
  13. Víctor (periodista), no es una cuestión de respeto o no respeto, el fútbol genera, además de muchos puestos de trabajo, muchas injusticias, y de paso sirve para distraernos de la realidad. Respeto lo respetable y critico lo criticable. Yo respeto que a ti te guste, pero eso no cambia lo que es en realidad.

    Víctor (nazareno), que no me guste el fútbol no es algo que dependa de que yo sea o quiera ser más o menos intelectual. Puede que sea un tópico, pero en mi caso no es algo que tenga que ver con el intelectualismo. Si no me interesara la cultura tampoco me gustaría. Es más, tengo que decirte que tan tópico es el ataque intelectual al fútbol como su defensa. Tú mencionas algunos nombres respetuosos que lo defienden y yo podría añadir algunos nombres más que lo atacan. Pero acercarse al fútbol desde un punto de vista artístico es una cosa y el fútbol real es otra bien distinta.

    Te pongo el ejemplo de los toros. Poemas del toro de Rafael Morales es un libro sublime y sin embargo el toreo me es bastante indiferente. Fíjate que el ejemplo de los toros me resulta muy útil. Hace años estaba de moda entre los intelectuales, ahora lo que está de moda es atacarlo. Todo es cuestión de modas. Pero una cosa es un objeto artístico y otra bien distinta es la realidad. No te digo yo que no me pueda gustar un poema sobre el fútbol de Luis Alberto, pero ver un partido real me causa hastío real.

    Esos valores que Martínez Estrada atribuye al fútbol son muy relativos. Si le echo imaginación puedo verlos en cualquier actividad humana. Desde cualquier deporte a una pelea a muerte entre gladiadores. ¿Eso quiere decir que la pelea entre gladiadores es comparable al teatro? Porque entonces todo se puede comparar al teatro y todo se puede comparar a todo.

    ResponderEliminar
  14. estoy de acuerdo con rafita. como es posible q la gente mas aclamada del planeta sean unos simples futbolistas o incluso actores?
    que dirian da vinci o einstein al respecto?
    tenemos autenticos genios en nuestra sociedad pero no interesa q sean conocidos.
    yo pienso q la actitud q tiene la gente con sus equipos de futbol es digna de la mayor de las sectas. uno puede asta sentir miedo si se mete en el campo de otro defendiendo a su equipo, o tener una eterna discusion con un muy buen colega suyo porque cada uno tiene q defender irracionalmente a su secta.
    veo que esto tambien pasa en españa con los dichosos partidos politicos, izquierda vs derecha. esto solo nos enfrenta y divide...
    creo q cada uno deberia tener sus ideas propias sin necesidad de pertenecer o identificarse con ningun grupo..
    1 saludo muy grande Rafa y espero q te aya ido guay en las oposiciones.
    Te quiero y admiro, Gon.

    ResponderEliminar